¿Qué experimentos, pues, se pueden explicar sólo con la intervención de la
TER? Iniciemos con algunas aclaraciones auxiliares. No tocaremos detalladamente
la electrodinámica cuántica, ya que su exactitud de predicción depende muy
débilmente de la exáctitud (esto para el movimiento del
receptor; para el movimiento de la fuente la velocidad de la luz puede
permanecer constante en general, de igual manera que, por ejemplo, la velocidad
del sonido), pero nadie ha hecho siquiera el intento de considerar que la
velocidad de la luz no es constante.
El fenómeno de la aberración estelar se explica perfectamente por la física
clásica [23] y se determina mediante los siguientes dos hechos escenciales:
(1) el cambio de la velocidad del sistema de observación durante el
transcurso del año a causa, principalmente, del giro orbital de la Tierra (este
estado es absoluto y no depende de la velocidad del movimiento rectilíneo del
sistema inercial o de la precencia del éter o de otro medio), y
(2) la
transmisión lineal del rayo de luz entre la fuente y el receptor en los sistemas
inerciales (para la teoría corpuscular esto es una consecuencia del carácter
inerte del movimiento de la partícula de luz; para la teoría ondulatoria, del
principio de Huygens).
Recordemos una vez más que la luz " al entrar" a nuestro aparato medidor
tiene una dirección y frecuencia fijas (no importa la prehistoria del proceso:
el movimiento de la fuente, el medio, el receptor) y es con esta "luz concreta"
con la que se realizan todas las mediciones. El experimento de Fizeau no es un
experimento crítico, ya que permite la grabación de la velocidad de la luz en un
medio
y las mediciones se realizaron para una concreta frecuencia fija , es
decir, no hubo la comparación de
y
, lo cual es
imposible de realizar en el experimento de Fizeau.
El hechar mano del tiempo de vida de los muones para demostrar la TER es
especulación pura. Crear dos sistemas inerciales que se muevan uno respecto al
otro a velocidades relativistas es algo que un está fuera del aclcance de la
humanidad actual. Y no hay que esconder una realidad completamente diferente
tras el disfraz de dicho experimento. El tiempo de vida de las partículas
inestables debe depender de las condiciones de su formación (incluso un núcleo
estable puede volverse exitado, inestable o, al contrario, puede tener lugar la
recombinación, etc.). Y las condiciones de formación de los muones a un altura
de
km durante las colisiones de los rayos cósmicos de altas energías con los átomos
de nitrógeno y oxígeno se diferencian de las condiciones en que tiene lugar su
formación en el laboratorio. Y no hablemos ya de que no se han medido a
diferentes alturas ni siquiera las velocidades, las aceleraciones ni la
intensidad de los flujos de los muones. Las mediciones realizadas en los
aceleradores revelan más bien el efecto de las aceleraciones y de los campos
sobre un proceso concreto de desintegración de partículas concretas. La
"demostración mediante muones" ingresó a los libros de texto de la TER desde
mediados de los años treinta. Unos años después se encontró que, en primer
lugar, los muones se forman a prácticamente cualquier altura y que, en segundo
lugar, su capacidad de penetración crece considerablemente con el aumento de la
energía. Aun así la pseudodemostración relativista no desapareció de los libros
de texto y con ella se les sigue tomando el pelo a los estudiantes (con respecto
a la cuestión de la ética científica).